Fotos

sábado, 14 de noviembre de 2009

Paz y Caballito de mar








Bueno, pues esto es que una tarde de este recién pasado verano y, hallándome con necesidad de solazarme contemplando el atardecer en esta peste de aldea a la que tengo la desgracia de pertenecer. Mejor digamos que es el lugar donde establecí mis raíces y acá, si Dios no dispone otra cosa (que creo que no) la espicharé. A lo que iba:

Me senté en el pretil del paseo marítimo, solito, y me puse a contemplar el juego de luces del atardecer, saqué la compactita y tiré una instantánea y luego otra. Me puse a mirar la profusión de mújoles cuyas escamas ventrales resplandecían, en sus incansables giros, a los ya débiles rayos del sol.

Estaba en esas y otras meditaciones bastante más profundas (algo así como por qué mi suegra lucía barba y bigote como los cosacos del Volga), algo digno de mencionarse. Cuando de repente veo perturbaciones en la superficie del agua de la pequeña ensenada que forma el puerto de este villorrio, levanto la vista y veo algo nada común (por lo menos para mí y eso que cosas raras he visto la tira). Algo/alguien venía atravesando la ensenada dando gritos como ¡Izquierda! ¡Derecha! ¡Ten sentido! Como yo soy el único al que normalmente le dicen cosas por ese estilo me quedé sorprendido que una voz que no conocía osara darme órdenes en aquel lugar y en aquel tono. levanté la vista y he aquí que un hombre jinete en su caballo venía atravesando la cala.

Me froté los ojos, no fuera que absorto como estaba en las barbas mencionadas más arriba se me hubieran liado en la única neurona que poseo. Pero no, seguía allí aquella visión. Y como no se me desaparecía a pesar de que me restregaba los ojos, pues que decidí sacarle foros. No fuera a quedar por embustero ¡faltaría más.

Se acercó un paisano y le pregunté que qué se suponía que estaban haciendo caballo y caballero, el paisano me contestó que el tal individuo (el caballero) era una especie de "matasiete" de una localidad distante 15 Kms y que, cuando le daba la venada venía a la playa para hacerse un espectáculo privado del que estaba seguro que tenía muchos fans. ¡Y tanto! esta aldea está extructurada en escalones y a buen seguro que al oír sus órdenes, muchos aldeanos, como yo, saldríamos a ver "la cosa" esa. También me contó mi paisano que le habían preguntado al individuo que por qué lo hacía, a lo cual respondía que hacer esos ejercicios sobre arena y con el agua de mar hasta el vientre del animal le sentaba de maravilla para las extremidades y los cascos del caballo.

Pregunté si el caballo se hallaba enfermo y me contestaron que no, que era capricho del jinete/propietario. Obvio es decirlo: se me presentaron razones más poderosas que las barbas de mi suegra en las que meditar. Por supuesto que ignoro que si lo que afirmó mi vecino es cierto o no, por lo tanto no me voy a meter en esas tesituras, pero los ademanes del jinete, su vozarrón (como si el caballo estuviera sordo, joder! y los aspavientos eran propios (creo) de las personas que quieren llamar la atención. Por cierto, que a mí me la llamó y más cuando veía que el noble animal obedecía tanto a izquierda como a derecha cuando se lo ordenaba aquel energúmeno. No se, insisto, si eso es habitual, si lo es ¡menuda faena tienen los criadores de caballos de toda España! Lo cierto es que después de hacer las fotos, pocas, me marché sintiendo vergüenza ajena: No me parece muy ético eso de hacer que el animal hiciera todo aquello a golpe de vozarrón que hacían enrojecer las piedras del malecón.

Dios le perdone.

A Ustedes que Dios les bendiga.

14 comentarios:

  1. Hombre Tonecho !!! Que alegría después de tanto tiempo poder volver a leer tu brillante prosa.
    Verdaderamente se te hechaba de menos.
    Un afectuoso saludo.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Fran6Q, me alegra verle de nuevo. Es que hay trabajos que no absorben hasta los minutillos que podríamos dedicarle al placer.

    Saludos cordiales.

    ResponderEliminar
  3. Tonechoooooooooo!!!!! Que alegría descubrirte otra vez aqui. Que bien.!!
    Ves como te decia que incluso en verano hay historias de esa nuestra Galicia dignas de contar.
    Claro que esta es digna de cualquier sitio por que siempre hay un loco que le gusta llamar la atención en cualquier esquina, lo malo es que se aprovechan para ello de un ser indefenso y docil, con otro no podrían claro.
    Pero si tan bueno es para el caballo, que no digo que no, poruqe no entra el tambien a pie por que a el si le es muy bueno caminar por el agua y la arena y si ya le cubre la cabeza mejor para la nuerona....
    Tienes razon, que Dios le perdone por que yo no podría.
    Un abrazo Tonecho.

    ResponderEliminar
  4. Gracias, Jara. Usted nos conoce muy bien y sabe que los caballos de dos patas acá abundan. Sólo hay que rascar un poquito y aparecemos como hongos.

    Gracias por estar ahí.

    ResponderEliminar
  5. Hola Tonecho, me alegra que retomes la escritura y prosa en tu blog, creo que muchos teníamos " mono"nos haces adictos y luego nos dejas sin "mercancía", que llevarnos a las neuronas. Bellas imágenes y bonita historia la del caballo, ademas confirma mi creencia que a la la playa van "animales" de toda índole, incluso algunos a caballo de otros, un saludo y un abrazo amigo.

    ResponderEliminar
  6. menos mal que el caballo debió ver el capítulo correspondiente de "Barrio Sésamo" y obedeció bien. imagínate que hiciera al revés y fuera "arriba, abajo" y tirara al jinete. igual incluso se lo merecería dicho sujeto. un saludo, Tonecho.

    ResponderEliminar
  7. Hola Bonavebe, seguro que el de abajo era un equino (no se si caballo o yegua, no me paré a tanto) pero creo que con las formas mostradas por el caballero, éste no tardará en ser montado.

    W, con la dulce vocecilla que te ha quedado (y a mí también) después de nuestras recientes aventuras ¿te imaginas al noble animal todo asustado y sacudiéndonos coces?

    Bonavebe, W, gracias por estar ahí.

    Saludotes cordiales.

    ResponderEliminar
  8. Hola indivíduo.
    Mirándolo desde un punto de vista positivo, el hecho de que apareciera "Curro Jiménez" te dio la posibilidad de hacer unas buenas fotos (y de actualizar el blog).
    Saludos Brother.
    Lorenso.

    ResponderEliminar
  9. Great many thanks, dear brother.
    ¡A ver si te parte un rayo, Lorensiño!

    ResponderEliminar
  10. Tonecho, hacia un tiempo que no me pasaba (dame una colleja por favor) y hoy me he dado un alegron, bueno me lo has dado tu. Entiendo lo de los bigotes.....no veas como, lo del caballo tambien, aunque la estampa era bella. Pero lo de la peste de aldea....claro esta que no la conozco, pero es un lugar bello. Aunque por otra parte puedo entenderte, donde vivo es un bosque, una aldea, a pocos kms de Madrid. Un sueño para muchos, pero uno se cansa de tener que cojer el coche hasta para comprar el pan.
    En fin me alegro de volver a leerte.
    er Maxi

    ResponderEliminar
  11. Ahhhhh ... Qué gusto da leerte amigo! Verdaderamente un relato en toda regla. Feliz retorno.

    Un saludo

    ResponderEliminar
  12. ¡Alabado sea Dios, Maxi, Pinastre! ¡Habéis venido!

    Ya estaba llorando a moco tendido: Snifff, me faltan mis hermanos de desdichas ¡asús!

    Gracias muchas por estar ahí, jóvenes.

    ResponderEliminar
  13. O cabalo morreu esgonzado e o xinete morreu o ano seguinte,que Deus se apiade da sua alma.

    ResponderEliminar
  14. A única peste que hai nesta preciosa aldea que é Camelle eres tí e as beatas e si non che gusta porque ni dios che pode ver xa sabes o que tes que facer...

    ResponderEliminar